<>
jquery carousel by WOWSlider.com v8.7.1m
 photo boton02JL_zpsckjnkuk9.png  photo boton03JAM_zpszktgxu2f.png  photo boton04EL_zpsbtaxdi2g.png  photo boton05MHB_zps1xzmlwqy.png  photo boton06MB_zpsld4fzufi.png

Marie-Hélène Brousse - Tras las pistas de la histérica moderna (2010)

Brousse plantea aquí que, a lo largo de toda la enseñanza de Lacan, «la histeria es la estructura que más responde al llamado del padre». Comienza por hacer un retrato de la histeria a la altura del Seminario 17, momento crucial de  «transformación de la histeria en tanto que síntoma [...] en la histeria en tanto que discurso», donde el discurso histérico «define el significante amo por el padre [...] como pura potencia simbólica
Si en el Seminario 17  Lacan somete los mitos freudianos a un análisis estructural y los reduce a una equivalencia (Muerte del Padre es igual a Goce de la madre), en el Seminario 18 va a salir de esto, oponiéndolos: «el mito de Edipo fue construido a partir de la palabra histérica, mientras que Tótem y Tabú fue construido [...] más bien en la vertiente de la neurosis obsesiva». Esta oposición le permite situar a la histeria y la neurosis obsesiva como «dos modalidades que se corresponden para [...] hacer existir la relación sexual vía el lazo, [...] habrá lazo fabricado por la ley o por el comunitarismo
Bajo esta observación, Brousse caracterizará a la época actual a partir del «ascenso del comunitarismo con Tótem y Tabú, por oposición a la declinación del Edipo» y situando que «la cuestión de la satisfacción está saturada por el ascenso del objeto a». Hoy «es admitido por todo el mundo que la relación sexual no existe», planteándose que «entre dos adultos que consienten, todo es posible», lo cual lleva a una redefinición radical de la perversión. Al mismo tiempo, las comunidades o asociaciones «reivindican una solución alternativa a la relación» donde «lo que viene al lugar del lazo social [...] es la relación con el objeto
Asimismo, opondrá la perspectiva del superyó como un llamado al goce, a la perspectiva de la histérica como un llamado a la verdad. Y en este sentido planteará que «es sumamente deseable que las histéricas hoy hablen para eventualmente hacer contra empleo al comunitarismo del superyó». Es que, a pesar de todo,  «la solución histérica continúa perturbando» bajo la forma de un  «no para mí»
La histérica moderna es entonces la que «sabe que el falo es un semblante, [...] y se pone en posición de estar causada, animada, por ese semblante y de tener que sostenerlo buscando un hombre que se lo permita», lo cual «coloca a la histérica del lado hombre.»
Finalmente, con en el Seminario 24, Brousse ubica que «la definición de la histérica es el inconsciente como Otro» y que «el amor al padre es lo que da un cimiento a la histérica, pero también lo que impide el trabajo analítico del lado de» una «neutralización de la diferencia entre conciencia e inconsciente», que piensa a partir de la banda de Moebius. Destacará que «cuando no hay límite entre la conciencia y el inconsciente, estamos del lado del inconsciente real.»
© Copyright 2015. Website by Way2themes - Published By Gooyaabi Templates